La tercera edad es una de las poblaciones más vulnerables a los trastornos psicológicos.
No se trata simplemente del desgaste físico de su cuerpo, sino que esta etapa de la vida, en muchos casos, coincide con momentos de crisis a las que no todo el mundo es capaz de adaptarse bien; por ejemplo, en determinados casos hay más soledad, muerte de amigos, duelo por la pérdida de la agilidad mental y del aspecto saludable, etc.
En este artículo veremos cuáles son los principales trastornos psicológicos habituales en la tercera edad, así como una descripción de sus síntomas característicos.
Al llegar a la vejez, sube el riesgo de desarrollar determinados trastornos mentales. Eso no significa que la tercera edad en sí venga de la mano de una mala salud mental, sino que estadísticamente, hay mayor propensión a experimentar en primera persona esta clase de problemas, debido a una combinación de factores. Veamos cuáles son estas alteraciones psicológicas relativamente frecuentes en la tercera edad.
- Depresión
A pesar de que mucha gente asocie la vejez a la tristeza, lo cierto es que quienes tienen mayor riesgo de desarrollar este trastorno del estado de ánimo son los adultos de entre 25 y 55 años. Sin embargo, al ser la depresión uno de los trastornos más habituales, también está muy presente entre las personas de la tercera edad.
Esta alteración se caracteriza por la persistencia de un bajo estado de ánimo durante varios meses seguidos, periodo en el que son frecuentes el sentimiento de desesperanza y la desmotivación, la tristeza, la tendencia a evitar mucho más las relaciones sociales, y en muchos casos, las crisis de llanto incontrolado.
- Trastornos de ansiedad
Los trastornos de ansiedad son también muy frecuentes entre las personas mayores, al mismo nivel que la depresión. Por ejemplo, se estima que están presentes en aproximadamente un 9% de las personas de 65 años, en alguna de sus formas: ansiedad generalizada, trastorno de pánico, agorafobia, etc. Por lo general, estas alteraciones vinculadas a la ansiedad son más habituales en mujeres que en hombres, independientemente de la edad.
Estos son los principales síntomas de cada una de estas alteraciones:
- Agorafobia: tendencia a evitar lugares en los que se siente que no se dispondrá de ayuda ante posibles crisis de ansiedad.
- Trastorno de pánico: crisis de ansiedad repentinas que hacen que la persona pierda el control de la situación, frecuentemente creyendo que va a morir.
- Ansiedad generalizada: tendencia a sufrir un nivel demasiado alto de ansiedad de manera casi constante, sin grandes altibajos.
- Adicciones
Las adicciones son muy frecuentes entre la gente mayor, especialmente los hombres: las sufren más del 1% de las personas de más de 60 años, siendo el alcoholismo el problema más habitual. Se cree que el estilo de vida sedentario y las situaciones de soledad frecuentes en esta franja de edad favorece que se desarrolle esta dependencia. Además, en muchos casos no cuentan con redes de apoyo para reconocer que tienen un problema, al estar alejados de sus familias (a causa de que sus hijos se han independizado y el resto de familiares han ido muriendo, por ejemplo).
La pasión por la psicología también en tu email
Únete a nuestra comunidad para recibir nuevos artículos y contenidos exclusivos
Suscribiéndote aceptas la política de privacidad
- Y en cuanto a trastornos neurocognitivos: las demencias
Las demencias no son exactamente trastornos psicológicos, ya que sus causas son fundamentalmente orgánicas y tienen que ver con la degradación de las células nerviosas en partes importantes del sistema nervioso central. Sin embargo, se hace necesario mencionarlas aquí debido a que son muy frecuentes entra la población más envejecida. Aproximadamente el 7% de las personas de 60 años se ve afectada por esta clase de enfermedades, y esta prevalencia se incrementa rápidamente en personas de más edad a partir de ese punto: se dobla cada cinco años en adelante.
Los principales síntomas de las demencias son los cambios súbitos de humor, la incongruencia entre el estado anímico y lo que ocurre alrededor de la persona, las pérdidas de memoria a corto plazo (al inicio) y a largo plazo (en las fases más avanzadas) y la abulia: la falta de motivación e iniciativa.
El apoyo psicológico para la gente mayor
En todos los casos en los que hay un trastorno psicológico, es necesario contar con ayuda profesional. La psicoterapia se ha mostrado eficaz para tratar los principales trastornos que afectan a la gente mayor, en algunos casos para llevar la casi total desaparición de los síntomas y en otros para mitigar sus efectos sobre la calidad de vida del paciente (como es el caso de las demencias, que a día de hoy no tienen cura).